Hoy afrontamos la pregunta por excelencia, la cuestión perfecta, porque no tiene respuesta. Su enunciado es: LA MUERTE. Y la retórica de las preguntas, si la examinamos con cuidado, nos presentará cuestiones básicas, centrales, vitales en nuestro desarrollo. Preguntas fuertes, que no ácidas, donde la palaba importante parece que tiene sentido.
20 noviembre, 2016 Leer más